Mirando a la solana, al Valle, se encuentra otro importe enclave para la cultura, la historia y ahora el turismo. La oquedad llamó la atención de los investigadores, que descubrieron algunas pinturas rupestres.
La portada es de unas dimensiones notables, como la entrada a una gran mina… los últimos estudios costatan la actividad minera prehistórica en estos lugares. Pequeños filones minerales superficiales que los antiguos explotaron con fuego y agua.
Se aprecia muy bien como horadaron la montaña, estrato a estrato hasta quedar limpio de mineral, principalmente hierro, aunque también se encontraban pepitas de oro.